Aunque este blog es bastante singular y diferente por su contenido, me permito hacer un paréntesis (mi Amo estará de acuerdo) para hacer mención de un detalle en forma de premio que nos ha otorgado alguien especial, Dulce{Adriano}.
Gracias preciosa por acordarte de este castillo tan personal de dos personas en el cual reflejamos de manera muy muy muy íntima nuestro paso y paseo por un camino que un día se cruzo y que desde entonces seguimos juntos sin soltarnos de la mano.
Gracias por acordarte en estos momentos duros donde estas haciendo alarde de una paciencia, entereza y aguante infinito. Desde aquí te mando mi cariño más sincero y un abrazo fuerte que te ayude a seguir mirando hacia delante con calma sabiendo que todo llegará.
Y te voy a dedicar una palabras, un poemita precioso de Lorca que dice...
La noche no quiere venir
para que tú no vengas,
ni yo pueda ir.
Pero yo iré,
aunque un sol de alacranes me coma la sien.
Pero tú vendrás
con la lengua quemada por la lluvia de sal.
El día no quiere venir
para que tú no vengas,
ni yo pueda ir.
Pero yo iré
entregando a los sapos mi mordido clavel.
Pero tú vendrás
por las turbias cloacas de la oscuridad.
Ni la noche ni el día quieren venir
para que por ti muera
y tú mueras por mí.
para que tú no vengas,
ni yo pueda ir.
Pero yo iré,
aunque un sol de alacranes me coma la sien.
Pero tú vendrás
con la lengua quemada por la lluvia de sal.
El día no quiere venir
para que tú no vengas,
ni yo pueda ir.
Pero yo iré
entregando a los sapos mi mordido clavel.
Pero tú vendrás
por las turbias cloacas de la oscuridad.
Ni la noche ni el día quieren venir
para que por ti muera
y tú mueras por mí.
"Gacela del amor desesperado". Federico García Lorca.